24 agosto, 2011

José Gumilla y el café

Guayana es territorio de primicias. En estas hermosas tierras nació la primera miss Venezuela, Sofía Silva Inserry; aquí, en El Callao, se jugó el primer partido de fútbol del que se tenga noticia en el país. Aquí, en Ciudad Bolívar, se imprimió El Correo del Orinoco, primer periódico patriota y se fundó aquí, en Upata, la primera Academia Venezolana de la Historia.

Otra de las grandes primicias que nos ofrece Guayana está en ser el lugar donde se sembró la primera planta de café en Venezuela. El padre jesuita José Gumilla fue quien trajo el café a nuestra región en el año de 1730. En su libro “El Orinoco ilustrado”, texto en el cual describe su labor misionera, Gumilla relata ese momento diciéndonos: “el café, fruto tan apreciable, yo mismo hice la prueba, le sembré y creció”.

José Gumilla, a lo largo del Alto Orinoco, fundó pueblos, estudio lenguas indígenas y se dio a conocer como civilizador inteligente y perspicaz. Además de todo ello, Gumilla nos legó el rico sabor y aroma que disfrutamos cada día en una humeante taza de café.

23 agosto, 2011

Guayana es... Lulú Basanta


María Lourdes Basanta es un perfecto y hermoso sinónimo de calipso. Conocida también como Lulú Basanta, esta destacada promotora de la cultura popular nació en El Callao, en 1932, y formó parte de las famosas comparsas de Isidora Agnes. Su nombre trascendió fronteras gracias a la labor como compositora de calipsos y entre sus obras más conocidas se encuentran “La Negra Isidora”, hecha como homenaje a su entrañable amiga Isidora Agnes, y “Guayana es…”, compuesta en 1966 para fijar posición ante el conflicto limítrofe con Guyana por la posesión de Anacoco, isla fluvial de 28 kilómetros cuadrados ubicada al este del estado Bolívar.

En una estrofa de la canción, Lulú Basanta reitera los límites de Guayana, afirmando la soberanía de nuestro territorio y diciendo con ello que las dimensiones del territorio venezolano no tenían discusión:

“Orinoco al norte
Brasil por el sur
Esequibo al este
Colombia al oeste
ese es el cuadrante
de nuestra Guayana
y toda esa tierra,
toda esa tierra
es venezolana”.

Lulú Basanta murió en el año 2010 dejándonos un legado de alegría que identifica a toda nuestra región Guayana.

22 agosto, 2011

La Negra Isidora


Isidora Agnes, mejor conocida como “La Negra Isidora”, fue una mujer excepcional, cultora del calipso y embajadora de El Callao, hasta el punto de hacer de ese pueblo minero del sur del estado Bolívar un lugar de referencia cultural en el mundo. La Negra Isidora nació en el año de 1923 y su empeño por preservar las tradiciones de su terruño la hizo organizar comparsas y hacer de los carnavales una fiesta que lograra estrechar los lazos de la comunidad.

Perseverante luchadora social, Isidora fundó sindicatos para la defensa del minero y de los habitantes de El Callao y desde su condición de militante del partido Acción Democrática dio refugio a los perseguidos políticos de la dictadura perezjimenista. A pesar de su militancia partidista, jamás aceptó tocar sus tambores para el partido. Dijo una vez al respecto: “mis tambores son apolíticos y en mis comparsas danzan adecos, copeyanos, urredistas, comunistas, masistas y los venezolanos todos juntos”.

La Negra Isidora muere de leucemia en el año de 1986 y, tras los honores militares ordenados por el presidente de la República, su cuerpo fue llevado al cementerio al son de una comparsa de calipso brindado por su pueblo querido.

La Negra Isidora seguirá con vida mientras siga sonando un bumbac y un calipso sea entonado con alegría por las calles.

21 agosto, 2011

El avión de Jimmy Ángel


El Salto Ángel, ubicado en el Parque Nacional Gran Sabana, es la caída de agua más alta del mundo, con una altura aproximada de 1.000 metros, y debe su nombre al aviador norteamericano Jimmy Ángel. La existencia de este majestuoso salto de agua era conocida con anterioridad por los indígenas de la región y abundan testimonios de españoles y venezolanos que ya habían avistado el inmenso tepuy de cortina líquida. Fueron precisamente esas descripciones y mapas que señalaban el salto los que motivaron a Jimmy Ángel a sobrevolar el tepuy en el año de 1937. Ángel intentó aterrizar en la meseta del Auyantepuy y sorpresivamente se encontró con que la superficie era un inmenso fangal cubierto de gramíneas. Con el avión semihundido en la cima del tepuy, Jimmy Ángel emprendió una larga travesía a pie, cruzando la selva para regresar a su hogar. El avión permaneció en ese mismo lugar durante 33 años y fue en 1970 cuando la Fuerza Aérea Venezolana inició el rescate del avión de Ángel. El avión, restaurado, permanece hoy exhibido en el Parque Ruiz Pineda de Ciudad Bolívar, como un homenaje a la aventura y el valor humanos.

20 agosto, 2011

Monstruos de Ciudad Guayana

Las historias de apariciones y fantasmas son comunes en tierras guayanesas. Existen relatos de seres fantásticos como “El peludo de Polanco”, animal misterioso que atemoriza a los bañistas del río Orinoco o “La carona de Caris”, sirena que convive con los pescadores de Ciudad Bolívar. Otros seres como “El caballo de tres patas” o las apariciones de duendes y chivos demoníacos son parte del imaginario colectivo de nuestra región.

Estos relatos, sin embargo, no son exclusivos de pueblos y pequeñas comunidades. En nuestra Ciudad Guayana, gran urbe de más de un millón de habitantes, también deambulan seres de otros mundos que alimentan la creencia popular. Es muy conocido, por ejemplo, el relato de los fantasmas del antiguo cementerio de San Félix, demolido en 1979 y sobre el cual fue construida la actual Plaza Miranda. Los vecinos de San Félix evitan pasar por ese lugar a la medianoche pues, según se rumora, es la hora durante la cual salen los antiguos moradores del cementerio. Otra historia es la de algunas mujeres de San Félix que cada cierto tiempo se reúnen en aquelarre y se transforman en aves, o la del empresario, dueño de una gran tienda comercial ubicada en Puerto Ordaz, quien vendió su alma al diablo y se convierte, de vez en vez, en un extraño animal con pezuñas.

Los relatos de apariciones y fantasmas son parte de nuestra cultura y siempre encierran una historia que nos identifica.